Y digo «Estoy» y no «Estamos» porque a mis Migueles no los veo ni poquito nerviosos, jajaja, mi esposo no ha empacado nada, se ríe de mi maleta en la puerta desde hace una semana y dice que no hay prisa, ya saben, hombres. Y mi chiquito sólo se me queda viendo a la panza y dice «Grandota» jajaja.

Es a nosotras a quien nos llega la bomba emocional, saber que estamos en la recta final, a días de ser Mamás por segunda vez y al menos en  mi caso, estoy invadida de preguntas como ¿Me va a doler? ¿Cómo va a estar mi hijo grande sin mí? ¿Y si me pasa algo? ¿Empaqué todo? ¿Lista para no dormir en unos buenos meses? ¿Será cierto que no voy a poder cargar a Miguel en toda la cuarentena? ¿Será mi último bebé? ¿Me falta comprar algo del super para dejar en casa los días que no estoy? Así, miles. ¡Qué agotador! ¿Verdad? Lo es. Ser Mamá es agotador, es como si una parte de ti estuviera SIEMPRE alerta, al pendiente, así se siente. Es por eso que dicen que no vuelves a dormir igual.

Ya les he contado muchas veces que tengo un tema cardiaco que se llama Disautonomía, debido a eso, mis bebés tienen que ser cesárea por indicación médica. Entonces, tengo día y hora programada. Eso me da muchísima paz, no les puedo mentir. Mucha. Aunque todo puede pasar, se me puede romper la fuente antes de tiempo u otras cosas que harían que tuviera que correr al hospital y se adelante mi fecha, pero espero y pido mucho que no pase y que todo sea como en mi primera cesárea.

He tenido dolores estos días, muchos, justo hoy cumplí 38 semanas de embarazo y de verdad admiro enormemente a las mujeres que tienen labor de parto de miles de horas y que nacen sus bebés después de la semana 40. Yo ya cuento los minutos para que nazca y ya estoy muy incómoda, adolorida en las noches porque se encaja, no duermo bien y me patea con todas sus fuerzas. Estoy agotada, esa es  la palabra.

Miguel nació exactamente en la semana 37 con 5 días, osea casi 38 y nos fue increíble, pesó 3.181 kg y midió 48 cm. Me acuerdo que hasta me fueron a alaciar el pelo a mi casa a las 5 am para llegar lindísima al hospital y cuando me pusieron el gorrito azul horroroso para entrar a la cirugía, se murió de risa mi Doctor y me dijo «Adiós peinado, a muchas les pasa» jajajaja. Esta vez no, no voy a citar a ninguna peinadora pero si me organicé para ir a mi cita de pestañas, manicure y pedicure antes de mi fecha. Son pretextos, cosas chiquitas que te hacen prepararte, ilusionarte, sentir que tienes todo listo, todo con calma y contenta, es muy buena estrategia emocional, lo prometo.

Llevo días viendo los videos en mi celular de cuando nació Miguel, lo que me costó la lactancia, el tamañito de sus manos y pies, la curación del ombligo con merthiolate blanco, mis puntadas, mis fotos en calzones y bra con cuerpo postparto, las fotos de mis desveladas, los baños de sol, las visitas, ufff, qué maravilla cuando sólo era un bebé porque literalmente estaba 24/7 para él y punto. Ahora estoy nerviosa porque por obvias razones no lo voy a poder llevar yo a la escuela ni recogerlo las primeras semanas, así que es otro cambio que siento feo que viva pero no puedo hacer otra cosa mas que enfocarme en lo más importante: Tener a mi bebé sano en casa y recuperarme de la cesárea porque es mi segunda en menos de dos años así que también me tiene nerviosa. Y van a ser dos chiquitos que necesitan a su Mamá muy fuerte y sana, así que venga.

Espero con todo mi corazón leer este post en unos meses y decir «¡Qué exagerada, me preocupé demasiado!» pero por eso escribo mis artículos al momento, para que no se me olvide lo que estaba sintiendo, porque se olvida, les juro que si no se olvidara todo lo que vivimos las Mamás, sólo tendríamos un bebé y ya jajaja.

Y la famosa maleta del hospital, me la pidieron muchísimo, se las dejo sin letras chiquitas:

Para Mamá:

-1 pijama por día + 2  extras por cualquier cosa, si te ensucias, te manchas, etc. Lleva pijamas con botones al frente para poder amamantar sin desvestirte y que el pantalón tenga resorte, no pijamas pegaditas (Cuando tienes cesárea te quedas 3 noches, toma en cuenta eso)

-2 batas lindas para recibir a tus visitas cómoda

-1 par de calcetines por día

-1 par de pantuflas

1 juego de bra y calzones por día + 2 extras por cualquier cosa. Aquí acuérdate de llevar bras o tops de lactancia, son los que tienen el clip para poder amamantar sin tener que quitarte la ropa. Y calzones aguaditos, si es cesárea lleva de tiro alto para que no te raspen la herida.

1 paquetito de pañales/calzones tena absorbentes para no usar las tipo kotex horribles que te dan en el hospital. Estos no se mueven y te sientes mucho más segura.

1 outfit para salir del hospital: Te recomiendo no cometer el mismo error que yo con mi primer bebé y llevar ropa de la talla de antes de embarazarte, me vi muy novata pero nadie me dijo y eso hice, así que llévate ropa aguadita y cómoda.

1 par de chanclitas para la regadera, para no resbalarte.

1 cubre lactancia: sabanita para poder amamantar si es que lo haces frente a tus visitas.

Neceser con shampoo, jabón, agua micelar, pads de algodón, crema de cara y cuerpo, chapstick o vaselina, cepillo de dientes, pasta de dientes, cepillo de pelo, diadema, liga o pinza para el pelo, maquillaje, desodorante, etc.

Tu almohada: Las almohadas del hospital son incomodísimas, me lo vas a agradecer.

Lanolina para pezones: La de Mom to Mom es buenísima.

Saca leches: por cualquier cosa, más vale prevenir.

Celular y cargador de celular.

Kit de recolección de cordón umbilical: si es que lo contrataste, yo lo hice con la empresa Cordón Vital.

Tarjeta de tu seguro y carta de tu seguro.

Hoja de pre registro e indicaciones del Doctor que te debieron de mandar impresa, si es que tenías fecha agendada como yo, para entregar llegando al hospital en Admisiones.

Silla del coche instalada para cuando salgas del hospital: En mi caso, es la Doona que siempre se las recomiendo, es carreola y car seat en uno.

Para tu bebé:

Ropa: Debes checar en el hospital donde lo vayas a tener si te dejan ponerle tu ropa o no te piden nada. En el mío, sólo me dejan llevar el outfit para el día que sale del hospital, entonces:

2 pañaleros (1 talla NB y 1 talla 0-3 meses por si está más grande)

2 pares calcetines calientitos

2 pares guantecitos para que no se rasguñe

2 opciones de jueguito de ropa para salir

2 gorritos

3 sabanitas

1 cobija

Para Papá o quien se quede en el hospital: 1 pijama por noche, 1 cambio de ropa para cada día, celular, neceser con cosas de baño, cargador y su almohada. No necesita más.

Pero lo más importante: DISFRUTAR, aunque suene a locura, disfruta. Desde que llegues, las contracciones, el proceso, la espera, durante todo ese tiempo ten muy presente que estás a punto de tener a tu bebé en tus brazos, sólo de escribirlo me emociono y muero por estar ya ahí, viéndolo, abrazándolo y llenándolo de besos.

Entonces, maleta lista, moisés listo, carreola y car seat listos. Su ropita lavada y colgada, sus pañales, sabanitas, todo. Me aplaudo el haber hecho todo con tiempo, sin prisa y con tantas ganas. Estoy emocionadísima, de verdad, ya no puedo más.

Así que ¡Estoy lista! Aunque aún falten unos días, ya estoy lista emocionalmente y  de  todo lo demás. Así que GRACIAS por escogerme Mariano, me urge verte completito, sano y fuerte. Eso es lo que quiero. Todo lo demás lo resolveremos. Gracias, gracias por cada patada, yo aguanto, tu sigue así de fuerte hasta que estés aquí con nosotros.

Estoy lista para lo que venga, para pedir ayuda si es necesario, para estar al pendiente de lo que siento, para llorar, sonreír, gritar o comerme un pan de muerto completo en la madrugada. Estoy lista para mi familia de cuatro. Agradecida con mi cuerpo y mi embarazo. ¡Mándenme mucha  buena vibra! Gracias por estar tan al pendiente de todo y permitirme compartir lo que más amo con ustedes.